Las Palabras claves que toda mamá debe enseñar.(vídeo)

El amor de una madre hacia sus hijos no solo se demuestra procurando atender sus necesidades físicas, materiales o incluso las afectivas que implica darles amor, comprensión, protección y cariño. La responsabilidad no termina ahí, hay otro aspecto muy importante, que incluso hasta se debería exigir legalmente a los padres, esto es: educar a los hijos, porque una persona educada es beneficiada como individuo, trasciende su ámbito familiar, en la comunidad donde vive y hasta la sociedad en general. De ahí la importancia que mamá no se limite solo criar a los hijos, si no también educarlos, y esto implica muchas cosas como disciplina, límites, asignar responsabilidades, valores, principios, buenos hábitos y otros; en fin, es todo un arte, pero nada que no se pueda hacer por amor, porque el que ama educa.

Dentro de esta educación, hay tres palabras claves que toda mamá debe enseñar a un hijo, principalmente con el ejemplo, porque aprenden mejor imitando, lo que sus oídos escuchan y sus ojos ven.

1) Por favor

Esta palabra está relacionada con la cortesía; desde pequeño, a partir de los 2 años se le puede enseñar que todo lo que pida sea con un gesto amable y con un “por favor”. Incluso momentos de berrinche y enojo no es bueno darle las cosas que exige, si no esperar a que se calme y decirle que hasta que no diga por favor y de buena manera, reconocerás su solicitud.

La cortesía y los buenos modales como parte de su vida cotidiana le facilitarán las buenas relaciones interpersonales, con vecinos, compañeros de clase, de trabajo y demás que tenga que relacionarse en la vida. No solo basta decirles directamente que digan “por favor”, es básico que escuchen a los miembros de la familia principalmente mamá y papá pedirse las cosas “por favor” así también cuando requieras algo de tu hijo debes hacerlo con el gesto amable y la palabra mágica.

2) Gracias

En este vídeo  vemos como este hijo dio las gracias ha su madre... y nos da una gran enseñanza.

Después de pedir las cosas con un “por favor” es importante que aprendan a dar las gracias al recibirlas. Es una palabra clave para ejercer el valor de la gratitud, esto es cuando una persona experimenta aprecio por otra que le prestó ayuda o algo. Los hijos educados son bienvenidos  en todas partes, y sí se les enseña desde pequeños esta palabra mágica también complementan sus buenos modales, recuerda su maestra eres tú, y todo comienza en casa, viéndote a ti ser agradecida, porque se aprende más por imitación. Así que te escuche dar gracias a papá y a los demás miembros de la familia, porque con ello, estás creando un ambiente donde ese vocabulario y la buena actitud es algo natural y automático.

Otro aspecto importante es que cuando  se olvide de dar las gracias, hay que corregir en el momento, indicándole lo correcto.

3) Perdón

De las tareas más difíciles, pero no imposible es enseñar a un hijo a pedir perdón, es mostrarles reconocer un error. No se trata sólo de decirles que pidan perdón, si no hay que fomentarles empatía, en sí, a enseñarles a sentir, para que el perdón sea genuino aunque sean pequeños. Este acto de humildad les enseñará en la vida a reconocer sus errores, que tuvo la culpa y que sienta arrepentimiento de sus actos.

Por ejemplo, cuando un pequeño le pega a otra persona, es importante que le pida perdón, pero también hacerle ver que ha tenido un mal comportamiento al herir a esa persona, y por ello necesita corregirlo con una buena actitud, esto es que le haga un cariñito. Así que si el hijo tiene una mala actitud contigo, con su padre, abuelos, hermanos o amiguitos, anímale siempre a pedir perdón.

Eso si,  es necesario medir nuestras palabras para que el niño no se sienta avergonzado en público.

Por último, no olvides que por sus frutos los conoceréis, es importante que le transmites tu fe, que con tu ejemplo y no por imposición, tu hijo aprenda amar y respetar a Dios. Así acompañado de su buena educación, desee orar y leer la Biblia, y no porque tiene que hacerlo, pensando que va quedar bien con los padres, si no porque le agrada enfocarse y relacionarse con Dios.